Se ha vuelto común la idea de que ser político, en la gran
mayoría de los casos, es sinónimo de corrupto, es cosa cotidiana enterarse de
que tal o cual político es acusado de esta conducta que parece ser cosa
inherente al concepto. Esto no es nada nuevo, desde que se tiene registro
histórico se tienen casos de esta casi inseparable conducta,
Cicerón en sus
famosas Catilinarias, o discursos dirigidos contra Catilina, senador conocido
por su conducta nada ética, describió en ellas muchas de las actividades y
posturas de una persona corrupta.
En nuestro país con el antecedente de algunos
virreyes en este campo de los malos manejos, el siglo XIX fue prospero en esta
tendencia de corruptelas que a la fecha han alcanzado magnitudes y grados de
cinismo de gran altura. La época
revolucionaria y la inmediata posterior, fue de los gobiernos llamados post revolucionarios, lo que equivale
a decir gobiernos priistas, también fue generosa en estos comportamientos.
Cuando
el PAN gano la presidencia, después de un largo periodo de lucha, esto
represento para la ciudadanía una esperanza y una corriente de aire fresco,
sobre todo por que durante los largos anos de oposición, su bandera fue la
lucha contra la corrupción, ya que sus
principios fundacionales le permitían erigirse en campeón de la honradez y el buen
hacer.
Al poco tiempo de la primera presidencia panista, apareció el caso
conocido como el “Toallagate” que fue el primer foco ámbar de lo que seria esta
, aun así hubo una segunda victoria panista, también manchada con la
corrupción, que aunada al mal quehacer y torpe gobierno, abrió las puertas al
PRI.
Hoy tenemos a un joven presidente fruto cuidado de las oligarquías de este
partido, y que no es si no la agradable figura que presta su persona y cargo,
al movimiento neoliberal proveniente de las instituciones financieras que se
han encargado de permitir el enriquecimiento de selectos grupos y la
pauperización de la gran mayoría de la población mundial.
Acabamos de ver lo
que podríamos considerar la venta del sector energético a las grandes
petroleras internacionales, con la complicidad del PAN y casualmente nos
acabamos de enterar de la posible entrega de un bono por desempeño, a los
legisladores que tan arduamente trabajaron para sacar adelante esta reforma.
Antes los cohechos eran disimulados, ahora se han convertido en algo publico y
se han disfrazado de bonos, cosa de los nuevos tiempos.
La corrupción parecía
ser patrimonio del PRI, pero hemos estado viendo que los panistas están
decididos a emularlos e incluso a rebasarlos. Como prueba de lo anterior tenemos
la fiesta que organizaron los legisladores blanquiazules en una lujosa casa de
Puerto Vallarta , en la que aparecen atractivas mujeres jóvenes departiendo
amigablemente con tan dignos señores. Además de la sospecha de que este evento
fue pagado con dinero de su presupuesto o sea dinero publico, el video que
circulo ampliamente, muestra la catadura moral de estos políticos de un partido
que presume de sus sólidos principios morales.
El presidente Madero, ya le había
perdonado a su coordinador en San Lázaro el asunto de los “moches”, cosa que no
pudo hacer en esta ocasión, viéndose obligado a sustituirlo. Lo que llama la
atención es el por que lo selecciono para una función tan importante, siendo
mal pensado podría decirse que fue por afinidad o por compromiso, ambas
suposiciones que hablan muy mal del señor Madero. Ante esta perdida de imagen,
están tratando con un ardid bastante barato, la consulta sobre el salario
mínimo, de recuperar la preferencia del
electorado. Cosa que me hace pensar que carecen de una agenda política
atractiva y propia que llegue al ciudadano, dado que este cada vez mas piensa
que el PAN es un apéndice del PRI. Mucho van a tener que trabajar los panistas
para volver a sus principios ideológicos, y así recuperar el interés de los
electores. En tanto que esto ocurre, intentare averiguar el pensamiento del
nuevo partido MORENA, quizá sea una alternativa interesante.
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